Frozen lair [Kovash y Zhivak]

Plick.

Plick.

El sonido de las gotas al golpear contra la tierra era tenue pero repetitivo, restos de una tormenta que ya habia pasado, y desde donde Kovash se encontraba, también el sonido de la olas rompiendo contra las rocas se unia a la sinfonia. Estaba vestido de manera poco usual, y pensaba mantener su ropa seca esta vez, era incómodo mojarse. Ver el agua hasta donde llegaba la vista era relajante, incluso cuando habia tormenta, muchas veces lo distraia de sus dolores de cabeza, pero solo cuando estaba en tierra.

La roca sobre la que se encontraba estaba mojada en su mayor parte, a una distancia del agua prudencial para no empaparse cada vez que una ola volvia a estrellarse contra ella. Kovash esperaba con las manos en los bolsillos de su ropa más vulgar a que su Lusus apareciera de una vez. Nunca se sabia cuando terminaria apareciendo... No sabia si existia el termino impuntual para los Lusus, pero si habia una condicion patologica para ello, el suyo seguro la tenia, y además era terminal.

Paso un tiempo hasta que finalmente salió del agua, salpicando para todos lados y agitando su gran cuerpo serpentino, recubierto de escamas blancas, hasta apoyar su colosal cabeza sobre el terreno, haciendo que la tierra vibrara bajo su peso.- Hey -fue su saludo universal antes de comenzar a acercarse a ella. A pesar de que habia tomado distancia antes por las olas, la aparición de su colosal guardian lo habia empapado de rodillas para abajo.

Los grandes ojos del ser, de un color indigo profundo, reflejaban los de Kovash del mismo color, mucho más pequeños mientras este se acercaba. Tan solo lo esperó unos instantes, hasta que se subió encima de su cabeza y entonces se agitó bruscamente de nuevo hacia un lado y se lanzó hacia el agua dejando tan solo su cabeza fuera de ella. A medida avanzaban rápidamente por las turbias aguas de Alternia, menos seguro de que esto fuera una buena idea tenia Kovash. Odiaba no poder saber que es lo que habia abajo de él, odiaba los lugares abiertos, de hecho, odiaba muchas cosas, pero pocas lo inquietaban tanto como la creciente paranoia que sentia ahora.

La colmena de Zhivak esperaba a traves de las leguas de agua que los separaban, no era un viaje demasiado largo, pero nada era seguro en Alternia. En la tierra podia defenderse, pero en el agua... Un escalofrio le recorrió la espalda imaginandose que clase de cosas podian existir ahi abajo. Su propio lusus era un buen ejemplo de lo que no querria encontrarse. Poco a poco este último, sin darse cuenta, sumergia más y más la cabeza en el agua haciendo que Kovash pusiera una expresion de desagrado mientras se movia más y más hacia atrás, aunque el espacio se le comenzaba a terminar.

Pronto se puso a gritarle improperios al animal mientras sus piernas empezaban a mojarse con agua helada de nuevo.

Tic.
Tac.

Tic.
Tac.

Sonaban las manecillas del reloj, estaba cómodamente sentada leyendo un libro, esperando a que llegase Kovash, que según estaba por visitarle en ese momento. Mientras su lusus andaba deambulando por ahí, cedió a dejar su libro en el escritorio donde se encontraba su ordenador y procedió a recorrer un poco su colmena mientras lo espera.

Se encontraba bajando las escaleras, de las cuales permitían el acceso a su dormitorio, cuidadosamente, ya que eran de hielo y podría fácilmente resbalarse de ellas. Mirando a los costados, se encontraban algunas pinturas que se las habían hecho algunos campesinos, conocidos de algunos trolls que formaban parte de su grupo de "trabajo". Algunos eran recuerdos, de victorias sobre algunas guerras, batallas que solían darse en años anteriores, aunque no tenía idea de que eran porque solo era un grub para saber que pasaba en esos momentos. O quizá, no existía en ese momento. Pero igual, su grado de interés por esas cosas era muy escaso.

Una vez terminó de bajar, se puso a recorrer hasta la salida. Había un cantidad de pequeñas esculturas de hielo, hechas en su tiempo libre. En un rincón, se veía un montón de bestias muertas, cazadas por su propio guardián, por lo cual se dignó limpiarla, ya que estaba llena de sangre.
Una vez terminado, procedió a limpiarse las manos. -Asco- fue lo que pasó por su mente. Decidió por fin salir de su colmena helada, para dirigirte cerca de un pequeño monton de nieve, a lo cual se sienta en él y se pone a esperar afuera.

Pero, se puso a recordar que su lusus anda suelto, por lo que podría encontrar a Kovash y capáz, lastimarlo o algo. Aunque, a decir verdad no le diste importancia al asunto. Es bastante grandecito para que se cuide solo.

Eventualmente terminó por llegar. Mientras más avanzaba, más fria se volvia la sensación, y no solo porque él estaba mojado. La nieve a su alrededor lo confirmaba, y aunque su lusus ahora tenia la cabeza fuera del agua, rompiendo el hielo con su cuerpo, él seguia congelandose por el viento de la misma forma que cuando habia estado un poco sumergido en el agua. Finalmente llegaron a un amplio lago congelado que se extendia como antesala a la colmena de Zhivak, bajo un cielo negro y monocromo, aún dejando entrever aquellos rayos de color púpureo que descendian de las nubes de vez en cuando.

Detuvo a su lusus en donde terminaba el lago y se bajó, dando un pequeño salto hacia la nieve. No habia pensado en que tan profunda podria ser hasta que se hundió hasta las rodillas al aterrizar, congelandose aún más y volviendo a mojarse. Su lusus, sin darle mayor importancia al hecho giró su colosal cuerpo y se volvió a hundir en las profundidades del lago, llevandole varios segundos volver a hundir todo su cuerpo.

Kovash no miró hacia atrás, solo esperó que no volviera a salpicarlo y más que solo desear empezó a apurarse hacia adelante, arrastrando las piernas con esfuerzo a través de la nieve y llevando las manos a los bolsillos. Se estaba congelando, pero su orgullo le impedia demostrar cualquier debilidad, menos una tan ridícula causada por su propio lusus, y seguramente a propósito. Apretando los dientes levantó la vista hacia la colmena próxima acercandose.

Se podía escuchar el aullido de un lobo desde donde estaba Zhivak, lo cual le llamó mucho la atención. Por ende se puso a buscar donde se encontraba aquél chillar de fiera. Era difícil buscar entre tanta nieve, entre los icebergs y los iglús que están por la zona. Cantidades de nieve por todos lados, los únicos colores que podías ver eran tonos celestes y blanco inmaculado, además del cielo monocromo del cuál está debajo.

Desgraciadamente su lusus andaba muy cerca de la costa, por donde andaba su "líder", quién trataba de encontrar donde demonios se encontraba la colmena de esta troll. La bestia se encontraba vagando sigilosamente por la nieve, pisando lenta y suavemente la nieve, aparentemente tratando de no hacer algún sonido. Desde lo lejos, podía ver a aquél tipo caminando con dificultad, ya que tenia de las rodillas para abajo cubierto de la nieve.
Se dispuso a acechar a su objetivo, quien vendría ser Kovash, convirtiéndose en su presa y el en el depredador.

Trataba de no estar muy cerca de el, para tratar de que él no pudiese detectar sus huellas, y si lo hacia, trataba de confundirlo de alguna manera para que no lograse encontrarlo.
El animal cada vez más se acercaba a su punto, que se encontraba totalmente concentrado en dirigirse a donde se encontraba su sirvienta. Una vez ya cerca de él, se decide a empezar su emboscada.
Salta, y.........................................

FIN, WE ARE AWESOME